Piermichel Bozzetti, uno de los más populares intérpretes del Dance italiano, tenía ya un pasado musical cuando saltó al éxito con How old are you, editado en 1984. Para aquella época ya había
realizado como Loopside una versión del Starman de David Bowie (tema que también versionaría Savage ese mismo año con el seudónimo de Claudio Mingardi), y realizaba versiones de temas pop y disco
con su propio grupo de directo. How old are you, publicado por una diminuta discográfica llamada Saar pronto pasó a ser uno de los éxitos comerciales del momento (de hecho, casi podría decirse
que fue El Éxito del momento), y sigue siendo, aún hoy, una de las canciones más vendidas del Dance italiano. Tras How old are you sería The world is you (1985) la que arrasaría en pistas y
ventas; otro tema que rompería esquemas (quién no ha tarareado su -excéntrico, por cierto- estribillo: Barcelona yo tengo corrida en la plaza de toros...), y tan imprescindible en cualquier
recopilación de clásicos como el anterior. La mención de la capital catalana, por cierto, no era caprichosa; no en vano fue uno de los lugares donde este artista tuvo mejor acogida. En 1986
aparecía Two for love, otra magnífica producción no menos comercial que las precedentes y que cimentaría el éxito de Miko Mission con un estilo más romántico, casi a medio tiempo, preludio de la
sorpresa que proporcionaría al gran público cuando, poco tiempo después editaba Striptease (con I like the woman's heart en la cara B), una canción extraña, sencillamente insólita para el estilo
Italo de la época y de inspiración más bien pop. El tema no fue demasiado bien recibido por los aficionados, pese a que algún importante DJ de la época llegase a declarar que era su tema
preferido de Miko Mission. En todo caso, el gran público no conectó con la idea, y Piermichel Bozzetti tendría que esperar hasta enero de 1988 para regalar un nuevo éxito artístico con I believe
-para muchos, esta vez sí, la mejor producción del vocalista italiano-. Enmedio, Bozzetti nos proporcionaba un otro éxito, Toc toc toc, muy bién recibido a nivel comercial (Miko Mission llamando
a la puerta del éxito... se decía en la época haciendo referencia a su repercusión), pero infinitamente inferior en virtudes artísticas que I believe (tema que, por cierto, también cosecharía un
aceptable éxito). Aún aparecerían otros dos maxis de Miko durante la década de los ochenta (aparte de la versiones house de How old are you que fueron apareciendo a partir de 1989, con no
demasiado acierto a decir verdad); fueron One step to heaven (su incursión de pleno en el terreno Hi-Nrg, con un tema archibailable y de beat considerable) y Rock me around the world, públicado
casi exclusivamente por Discomagic y llegado hasta nuestro país gracias a la importación, puesto que ninguno de ambos fueron licenciados en España, siendo los primeros que no lo hacían. I fly
(1994) volvería a dar a conocer el nombre de Miko a toda una generación que poco o nada sabía de sus primeras joyas, con un tema ya en la onda Euro-Nrg de mediados de los noventa; como era ya
obligado en la época, incluía diferentes versiones y, eso sí, una melodía identificable y bastante comercial. Éste sí fue publicado en España, pero Mr. Blue (1995), su siguiente tema, volvería a
no licenciarse en nuestro país, toda una pena porque el disco (que incluye varias versiones, entre ellas una lograda accapella) es bastante más que aceptable, si bién menos contundente de lo que
las producciones europeas del momento imponían. Miko Mission ha desarrollado también, como es habitual en el Italo, otras facetas artísticas (compositor, letrista, productor), así como
interpretaciones realizadas bajo otros nombres comerciales, entre las cuales destacan Ring the Bell (de Alan Barry), o en la mencionada producción de Loopside. Inmerso en decenas de creaciones
Italo, si cabe destacar un tema de Piermichel Bozzetti sin el nombre de Miko Mission en la portada, ese es sin duda Dial my number, de R. Bais, imprescindible obra maestra del Italo Disco
publicada por Many Records en 1986, e interpretada según la opinión dominante por Romano Bais (creador a nivel productivo de los temas de R. Bais -Living in New York-, pero aparentemente no
siempre vinculado con la interpretación vocal de los mismos...). Una más de las polémicas servidas en el ring del mundillo Italo (como la correspondiente a la interpretación de Bolero I wish,
otra joya Italo interpretada con un timbre vocal realmente similar al de P.M. Bozzetti, pero cuyo protagonismo vocal despierta enconadas discusiones... Lo que resulta en todo caso evidente es que
Bozzetti se vio envuelto en varias (imprescindibles) creaciones de la época, dando cuenta de la versatilidad que, como en al caso de otras relevantes figuras italianas (Farina, Zanetti)
atesoraba.